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jueves, 22 de abril de 2010

Nos quedamos sin 007

Bueno, esto no se veía venir, pero la METRO siempre ha tenido problemas de financiación. Y ya viene de antiguo. De manera que Daniel Craig es posible que se haya comido el presupuesto, y que los FX, hayan vaciado las arcas de la productora, y que la presentación creativa de Broccoli, no sea posible verla. Y aún más. Por regla general, las productoras pertenecen a empresarios judíos (no soy antisemita), y que siempre han mirado por ellos. Da la casualidad de que la financiación es cosa de arriesgarse. Pero, si son tan avispados, en vez tener que vender la productora, dueña de los derechos de James Bond, ¿por qué no se buscan socios europeos? En esto, Hollywood es muy exclusivista. En los 80, compartían los gastos con la productora inglesa; pero parece que la demanda se debe a que todos quieren ese trozo de pastel del que se obtiene tanto beneficio como de las hamburguesas. El único fallo de las productoras es que piensan en los beneficios y las franquicias, y no en las personas, que son los que pagan las entradas de cine. En fin, que hay más cosas que pierden a la Humanidad. Y por una productora más que se arruina, el mundo no se hundirá.

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