No hay errores

No es un error, es un acierto

No hay errores cuando los hay. Además, siempre que hay desapariciones o accidentes sospechosos, estos están más que calculados. Los errores a propósito, o  adrede, no siempre tienen explicación; pero la gente empieza a hacerse preguntas, y se da cuenta de que la realidad que viven no es la misma, porque es otra, bien distinta, y que para ellos es irreconocible. Y, entonces, la situación se vuelve, surrealista e inconcebible, y el resultado es la duda, la confusión, y luego, la sensación del cuento que le han contado. No hay errores.