Bueno, esto es distinto y agradable, sin colesterol, pero con kokoro |
Los atascos en Madrid son peores que las leyendas urbanas del mismo. Sobre todo, en verano, porque es verano oficial, desde luego. Pero los atascos no se pueden soportar. No se sabe dónde empieza o dónde termina; pero, en ocasiones, nos pillan desprevenidos. Los nervios de la ciudad y de sus distritos, también sufren de colesterol, incluso cuando no se les necesita. Pero, en verano, en el autobús, el regreso, si hay atasco, es una pesadilla.
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