Me refiero a esos recuerdos que, tras ser olvidados, y al ser sentimentales, hacen más daño que cuando eran recientes, pero que siguen ahí, y no se apagan, porque se hayan envueltos por la manta del deseo, que se rompió y rasgó hace tiempo, pero que esas cenizas no arden, pero provocan heridas, sobre todo, por la constante falta de higiene. Es decir, que se trata de olvidar, y quemas las fotos y los recuerdos, las memorias dolorosas, y te quedas vacío, pero con la sensación de que esa memoria es tan letal como poco saludable, y queda el odio, porque, cuando uno es víctima de la traición, el dolor del pasado queda ahí. Y se espera que sea menos doloroso, claro.
Eight days a week... I love you
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He perdido a algunas personas muy queridas para mí. John es uno. Se fue
hace muchos años un día como hoy. Le quería y todavía le quiero. Es algo
inevitable...
Hace 12 años
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