Se ha descubierto que el famoso y leído Diario de Anna Frank, es posible que ella no fuera la autora, porque el bolígrafo con tinta no se inventó hasta poco después de su muerte en el Campo de Concentración Auschwitz-Birkenau. El asunto se pone más delicado cuando se advierte que la redacción es distinta. Pero este artículo, de hace tiempo, demuestra que, en la Literatura hay misterios sin resolver, tales como la escritura de las obras de Shakespeare, o la redacción de El Lazarillo de Tormes, del cual se cree que lo escribió un noble que se escondía en el anonimato, y que llevo a cabo la escritura como un entretenimiento, es decir, que lo escribió para divertirse. Pero, enterarse de que el Diario no lo escribió, en parte, la autora, es como cuando te cae encima un cubo de agua congelada (la hostia te la llevas, porque es hielo); pero eso no quita que no se pueda leer. Hay que pechar con que es un clásico, y se ha de respetar. De hecho, algunas obras de Cervantes, como Los Baños de Argel se teme, y con razón, que el magnífico autor de El Quijote no sean de su autoría. De enigmas está el mundo lleno..., por eso, tengo la certeza de que seguimos escribiendo, para comprender mejor, o hundirnos en las tinieblas.
Eight days a week... I love you
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He perdido a algunas personas muy queridas para mí. John es uno. Se fue
hace muchos años un día como hoy. Le quería y todavía le quiero. Es algo
inevitable...
Hace 12 años
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