Un final de mes en donde se confirma que saldremos de la crisis, en donde, por un desliz, los sindicatos más importantes de España, confiesan que se gastaban las ayudas en bebercio y comilonas, en donde el Gobierno meterá mano a las pensiones, y el año que viene, o dentro de dos, perderá el PP todos sus votos, por utilizar las pensiones como excusa para recortar, donde no tenía que recortar, y eso es muy grave.
Claro que, escribiendo esto con resfriado, la sensación es peor: Dudo mucho que los pensionistas tengan que pagar el pato, cuando las gestiones del Gobierno, siempre han sido nulas para escuchar. Como mayoría absoluta hacen lo que quieren, pero se pasan.
Aplaudo, sin embargo, al Gobierno, porque una terrorista, Inés del Río, no recibirá indemnización ninguna, después de que los ignorantes de Estrasburgo, tumbaran la Doctrina Parot. Además, la propia etarra no ha indemnizado a sus víctimas, ni se ha arrepentido, y eso le resta puntos. Porque los terroristas siempre restan. Por suerte, el Gobierno congeló los 30.000 euros, y serán para las víctimas, además que Del Río debe mucho más dinero a cada una de sus víctimas. Por lo menos, esto hará pensárselo, muchas veces, a futuros terroristas en prisión. Libres, pero muertos de hambre. Qué aprendan.
Y, bueno, empiezan estos días Halloween, un producto importado de los USA a Europa; un producto, todo hay que decirlo, heredado de la Antigüedad que celebra el Día de los Muertos, y que, dentro de lo que cabe, es la excusa perfecta para soltarse, siempre que uno no se tropiece con un zombi por el camino.
Nos vemos el Mes que viene.