Octubre, octubre

Un octubre calentito y con más despropósitos, es el que ha empezado: subida de la luz, más impuestos, menos pensiones, menos futuro y menos trabajo. Nos acercamos del caos más absoluto al hundimiento absoluto: copago sanitario, copago de medicamentos, copago en todas partes, y una casta política que suma sus ganancias mientras "el sacrificio" de nuestros bolsillos es ejemplar. ¿Hasta dónde llegaremos? A nada.

No tenemos por qué aceptar estas medidas espartanas. No se nos trata como a personas, sino como a productores de dinero. En primer lugar, fuera falsedades, de los dos partidos principales, y de los pequeños y de los sindicatos (el USO queda fuera); vivimos en una vergüenza continua, porque no se nos tiene en cuenta; sólo para vaciarnos la cartera.

Menudo octubre, octubre.