Siempre me sucede lo mismo. Cuando quiero escribir una entrada y el tema no llega, pongo títulos al azar, para ver si sale el tema en cuestión, pero este se queda rezagado. Es el error, común en mí, de escribir online. Pero, por lo menos, soy genuinamente yo, y eso me convierte en un nick completamente libre y autónomo. Es decir, que soy libre de pensar lo que quiera, lo que me de la gana, y, como sé que me leen muy pocos, por lo menos aquí, puedo ofrecer un poco de aire fresco.
Claro que, tendríamos que distinguir entre lo público y lo privado en la Red. Sí, Internet que, en realidad, es la Red, donde las informaciones se entrecruzan. Pero hay tanta información, que algunas son inútiles. No se encuentran, en ocasiones, lo que se busca. Se supone que la Red es la autopista de la información, pero sucede lo contrario. Cada cierto tiempo que he estado buscando información sobre escritura, apenas he hallado un par de trabajos que merezcan la pena. También, he sido testigo de cómo la información se torna vieja y obsoleta. No se remoza nunca, y la sensación es de una frustración total.
También he esperado meses para que la información literaria no fuera "la de siempre", y ha sido frustrante, porque la misma información ya ha cumplido su cometido. Sé que, para los nuevos Internautas, los que llegan, la información es nueva. Ciertamente, que hay páginas que, cada día, cultivan nuevas remesas; pero hay otras páginas y otros blogs que mueren, y quedan a la deriva. La deriva de nuestra civilización.
Y, en ocasiones, creo que vivo en Tierra-2, porque me da la sensación, en este Multiverso, que la alternativa del Planeta, es la alternativa del Cosmos. Mañana..., ¡más!
No hay comentarios:
Publicar un comentario