Las desgracias nunca vienen solas, y esta vez, nos ha tocado la negra a toda la Humanidad. Mil muertos más en Japón y 300.000 heridos, entre desaparecidos y la pérdida de huellas. Lo que parecía que iba a solucionarse ha empeorado. Japón ha vuelto a la tranquilidad, pero es posible que, caminando por Tokio, la cosa se ponga trágica como aparezca algún cadáver entre los edificios. Si las cifras han aumentado, me fiaría más del baremo de los investigadores y periodistas que de las palabras del Presidente nipón (que no recuerdo como se llama); más muertes que, desde luego, ya no podrán levantar el país, y continuar trabajando por la economía (porque los japoneses hacen huelga trabajando más, y aumentando la producción); o que, no podrán visitar a su familia, y si convivir con la Familia Celestial-con Buda y toda su Corte y cohorte-; mas, una cosa está clara: por mucho que tratemos de descifrar el porqué de este tipo de catástrofe (que ha logrado destrozar el ritmo de un país) nos queda la esperanza de que, por lo menos, el ser humano no es el culpable del mismo. Eso sí, los japoneses recuerdan muy bien el bombardeo nuclear de Hiroshima y Nagasaki, pues de ahí, se creó a Godzilla, en franca protesta contra la destrucción del ser humano, y robots gigantes de la serie Gundam (un gundam, creo que es una máquina armada, como Terminator, sólo que gigante y más peligroso, aunque también significa máquina de guerra); en fin, veamos como resuelve todo, y deja de desaparecer gente como cuando el correo se pierde.
Eight days a week... I love you
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He perdido a algunas personas muy queridas para mí. John es uno. Se fue
hace muchos años un día como hoy. Le quería y todavía le quiero. Es algo
inevitable...
Hace 12 años
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