Algunos se han dado cuenta hace tiempo; otros, demasiado tarde, pero han llegado a tiempo. Son los hombres y las mujeres que van a trabajar todos los días a su trabajo, cuando encima les señala el puñal del paro. Esos salvan el mundo todos los días. Madrugan para levantar el país: sean obreros, oficiales, mecánicos, profesores y maestros, y los barrenderos, un poco enquistados estos últimos días, porque eso de tener que despedirse 45 días, de manera temporal, es una tomadura de pelo, y deberían hacérselo mirar.
También, que gracias a estas personas, el país se levanta, cada día, con esperanzas, de tal manera, que podemos estar tranquilos. Pero basta de recortes. Las ayudas a los Bancos, es una estrategia para que nosotros paguemos las malas gestiones y los excesos de estos cafres del Gobierno. Pero esto se debió al Gobierno anterior. La crisis se creció por la Merkel. Le sobraba capital, y se ha dedicado a entrampar a los países vecinos. Pero no le queda otra que condonar la deuda de Gobiernos irresponsables que cayeron en sus garras.
Los Gobiernos de la Unión Europea, en parte, se han olvidado de sus ciudadanos. Tanto sacrificio es excesivo, y si estamos viendo la luz, ya es hora de crear empleo, y que la izquierda se convierta en la salvadora de una realidad, que ellos destruyeron. Saludos a los superhombres/supermujeres que se levantan todas las mañanas para que la maquinaria no se pierda.
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