De todo

La crisis continúa. Bruselas apretando, y cómo. Y es seguro que España no se recupere porque, desde el exterior, están pensando en aniquilarla. Y escribo aniquilar, en el sentido de destruir. Si nos rescatan no taradarán en lanzarnos o tirarnos los buitres para que la mayor parte de la Unión Europea nos despedace. Y luego, la sed de independencia de Cataluña, en donde los políticos idiotas como Mas, prefieren ignorar la Historia en común, y crear una falsa. Así, no me extraña que Europa nos mire como nos mira, porque ahora tenemos más cabeza, pero los payasos de turno esperan arrastrar al pueblo patrio en contra.

Y, por último, que vamos a pasar, por este mes, y el siguiente, por unas Navidades y un Fin de Año movido, con más catástrofes financieras, y que dudo que el mundo se acabe, porque así no será. Teniendo en cuenta que nos las ingeniamos nosotros solitos para estropear el ambiente.

Pero no ha sido un mes tranquilo. Nos hemos endeudado más. Las arcas, apenas se llenan, y nos desangran. Hemos de darnos cuenta de que quienes pagamos las tontorrías de ciertos ajustes, somos nosotros, y, de alguna manera, aún aplaudiendo lo que hacen, pagamos las personas corrientes y molientes, los auténticos representantes de la sociedad. ¿Hay sociedad, me pregunto?