Millones de ideas

2012. Ya queda menos para que el año que viene se presente. 2012 ya ha envejecido, y camina con muletas. Queda un día, pues mañana es el cambio de año. Mañana, 31 de Diciembre de este año, el año dará sus últimos estertores, y le faltará la última sístole y diástole. Un par de bocanadas de aire, y, a las 24.00 del día 31, dará paso a su suplente, el año 2013.

Pero hay millones de ideas rondándome por la mente, y nuevos proyectos, que es posible que continue el año que viene. También, sobre todo, que las ideas raramente venden. Las ideas se desarrollan, pero cuenta la escritura. Escribir. No hay dilema, si no provocar que otros te comprendan.

Pero, más importantes que las ideas son las palabras. Se ha de trabajar con palabras. La justeza es un don. Pero es un don pesado, porque la justeza se busca. La palabra justa, nunca llega. Para eso está el DRAE o el María Moliner, y un sinfín de ayudas por la Red.

Cuando escribo estas líneas deslavazadas, el mundo sigue tal cual, con las noticias de siempre, que parecen distintas, pero son iguales. Acaso la realidad se transforma en ficción para definirse aún mejor. Pero, ¿qué definición hay cuando la ficción no es, ni mucho menos, realidad?

Una pregunta para otra futura entrada.